Intenta estos consejos basados en la ciencia para ser más positiva y recuperarte rápidamente de los retos de la vida.
Posiblemente dediquemos tiempo a pensar cómo ser más saludables, pero no siempre pasamos mucho tiempo pensando cómo ser más resilientes. La resiliencia es fortaleza mental. Con ella puedes sobreponerte más rápidamente ante la adversidad y encontrar el lado positivo en momentos muy difíciles.
En su libro, The Resiliency Advantage, el fallecido Lic. Al Siebert, sostiene que las personas sumamente resilientes son más flexibles, se adaptan más rápidamente a las nuevas circunstancias y “se abren camino en constante cambio.”
Si quieres comenzar a desarrollar tu resiliencia, estas son nueve cosas básicas que puedes hacer:
1. Cambia tu autoplática
Presta atención a los pensamientos que te vienen a la cabeza. Si son críticos o negativos, reemplázalos por uno o dos pensamientos positivos.
Según el pionero en psicología positiva Lic. Martin Seligman, puedes darte una intervención cognitiva y contrarrestar el pensamiento negativo con una actitud optimista.
Tratarte con autocompasión a veces no es tarea fácil, pero cuando eres amable contigo tu resiliencia aumenta porque tienes tu propio respaldo. Trátate como si fueras tu mejor amiga.
2. Celebra tus aciertos
Si no crees que puedes hacer algo o si tu autoestima está flaqueando, recuerda la vez que triunfaste. Anota tu lista de aciertos, de todas esas veces que lograste algo que no creías que podías hacer.
Recordar tus triunfos restablece la confianza en ti. La Lic. Barbara Fredrickson, psicóloga y autora, señala que necesitamos una relación 3:1 de experiencias positivas a negativas para ganar resiliencia y prosperar en la vida.
3. Sé firme en cómo te ves
Para el Lic. Gary Sarver, psicólogo y profesor de la Universidad de Ohio, una de las maneras más sencillas de fortalecer tu propia imagen es tomar decisiones que te hagan sentir bien sobre quién eres.
Con una autopercepción positiva, no dejarás que los ánimos y las opiniones de los demás te desestabilicen. Te darás cuenta que la opinión que más importa es lo que tú opinas de ti misma.
4. Concédete palabras de ánimo
Si repetidamente te dices que eres fuerte, no solo comenzarás a creerlo sino que además buscarás maneras de probarte que es verdad. La mayoría de nosotros somos mucho más fuertes de lo que pensamos; en primer lugar, solo tenemos que creerlo para poder verlo en nuestras propias vidas.
5. Sal de tu zona de confort
Es difícil creer en nuestra fortaleza si nos ocultamos en una zona de confort. Haz las cosas que te asusten un poco y observa cómo se fortalece tu resiliencia.
¿Temes hablar en público? Primero intenta hablar ante un grupo pequeño. ¿Te inquieta cambiar de trabajo? Solo comienza por la entrevista. ¿Temes mantener una conversación difícil? Primero escribe qué quieres decir. El temor se disipa con la acción.
Elabora tu propio mantra. Intenta… Hagamos esto. Sé audaz. Sigue avanzando. Olvida el miedo. Recárgate pensando en alguna frase.
6. Cultiva tus relaciones
Las personas resilientes suelen tener fuertes sistemas de apoyo familiar o cultivan fuertes relaciones de mutuo apoyo con amigos y mentores. Saber que tienes personas a quienes acudir en momentos difíciles te hará un poco más fuerte.
7. Estimula tu energía
Quedarte sin energía es una rápida forma de agotar la manera positiva en que te sientes contigo misma y te quedas con la sensación de haber agotado todos los recursos. ¿Qué actividades te recargan? ¿Hacer ejercicios? ¿Pasar un día en el campo de golf? ¿Una cafetería y un buen libro? ¿Ver una buena película? ¿Caminar por el bosque? Cuando te encuentras en plenitud, tu resiliencia mental se mantiene fuerte.
8. Cavila menos
Si te encuentras quejándote de los problemas o tienes momentos de ansiedad, intenta adoptar una perspectiva bien amplia y reconocer que muchas de las cosas en las que no dejamos de pensar jamás ocurren o después de una semana, ya no importan. Intenta soltar más cosas para poder utilizar todo tu ingenio en pensamientos fortalecedores y en tomar acciones positivas. En Emotional Intelligence: Why It Can Matter More Than IQ, Daniel Goleman escribe que la conciencia de uno mismo es "el cimiento de la inteligencia emocional fundamental subsiguiente: ser capaz de deshacerse del mal humor.”
9. Duerme más
El sueño mejora todo, incluso nuestra resiliencia. La falta de sueño hace que nos estresemos, que estemos más reactivos, que tomemos malas decisiones y que nos sintamos mentalmente agotados. Dormir la cantidad de horas suficientes (alrededor de ocho horas por noche) estimula tu poder mental, recupera la lucidez y es más probable que contribuya a tener una actitud positiva.
Cuando te sientes mentalmente fuerte, puedes relajarte y buscar la vida que quieres sin limitaciones. No sientes miedo a la adversidad o al cambio porque sabes que te adaptarás. Es más probable que las personas resilientes se esfuercen por encontrar lo positivo y compartan el amor con los demás.
Sandra Bienkowski es colaboradora habitual de Live Happy y fundadora y directora ejecutiva de TheMediaConcierge.net.