Peter Reinhart, autor, experto y maestro de cocina, nos explica por qué la pizza se ha convertido en la comida favorita del mundo.
Peter Reinhart es panadero y autor de Charlotte, Carolina del Norte. Fue co-fundador de la legendaria panadería Brother Juniper en Sonoma, California y autor de varios libros premiados sobre el arte de hornear pan, entre ellos, Bread Revolution y The Bread Baker's Apprentice.
Hace 10 años emprendió un largo viaje desde Nueva York hasta Phoenix, AZ, pasando por muchas ciudades intermedias, e incluyendo una visita de paso por Italia, para descubrir dónde encontrar y cómo preparar la mejor pizza del país. Sus conclusiones formaron el eje central del libro American Pie: My Search for the Perfect Pizza.
Conseguimos hablar con Peter para hacerle algunas preguntas sobre la comida favorita de los Estados Unidos.
Live Happy: ¿Qué tiene la pizza para ser tan popular?
Peter Reinhart: La pizza, si lo piensas, es solo masa con algo por encima. Pero hay algo increíble en ese concepto de ‘masa con algo por encima’: piensa en las quesadillas, las tortas con queso grillado, las tortas en general o el pan naan, como variantes de la pizza con otros nombres.
Después de todo, la pizza es el medio ideal para la transmisión de sabores, y cuando la masa es excelente y los ingredientes para agregar por encima son de buena calidad la experiencia de sabores que puedes ofrecer es inolvidable. Creo que esa es la clave de la popularidad de la pizza: una gran combinación de masa e ingredientes para agregar por encima en un perfecto conjunto de transmisión de sabores.
LH: ¿Por qué cree que tanta gente adopta la pizza como plato nacional?
PR: Porque nos gusta reivindicar todo como propio a medida que lo adaptamos a nuestro paladar, con ingredientes y preferencias locales. Los estadounidenses tienen tendencia a no atarse a las normas tradicionales, como por ejemplo al método tan específico de la pizza napolitana (aunque, excelente) y podemos acceder a muchos ingredientes diversos y muy buenos, como harinas de excelente calidad, nuestros propios quesos locales basados en los quesos europeos y una gran variedad de ingredientes internacionales alternativos.
Además de la habilidad natural de la pizza de transmitir sabores, hemos creado una cantidad ilimitada de variantes que todos pueden reivindicar como propia. Es una especie de situación en la que ganamos todos.
LH: ¿Qué es lo que más le gusta de la pizza? ¿Qué lo llevó a querer investigar y escribir sobre ella?
PR: La pizza simplemente funciona. Incluso la pizza común, una pizza congelada, es mejor que nada porque la masa con algo por encima siempre entrega sabor. Pero mi búsqueda fue descubrir qué diferencia la pizza buena de la excelente, puesto que todo el mundo trabaja con el mismo concepto básico: masa con queso e ingredientes para agregar por encima.
Una vez que has probado una pizza memorable sientes que no querrás volver a probar una pizza común, aunque no la dejarás de lado cuando es todo lo que tienes para comer. Pero esa es la cuestión que me desvela: en qué se diferencia lo bueno de lo excelente, y la pizza es el ejemplo perfecto de esa dicotomía.
LH: ¿La pizza hace feliz a la gente? De ser así, ¿por qué?
PR: Sí, por las razones que he citado anteriormente. Es el medio ideal de transmisión de sabores pero aún así, existen muchas maneras de prepararla. Es también un oficio que cualquier persona puede aprender, por lo que se está convirtiendo en un gran pasatiempo hogareño, al igual que la panadería o la elaboración de cerveza artesanal.
También es una de las pocas comidas que puede reunir rápidamente a toda la familia, ¿a quién no le gusta la pizza? Es una buena manera de democratizar tu mesa: la única cosa en torno a la cual todos podemos unirnos y disfrutar.
Traducción: Pat Melgar
