Intenta estas rápidas intervenciones para mejorar en el trabajo.
Cuando pensamos en nuestro trabajo, muchos desearíamos ser un poco más felices. Pero cambiar de actividad laboral, cambiar de jefes o encontrar simplemente un poco más de alegría entre todas las cosas que tenemos que hacer, parece estar fuera de nuestro alcance. Muchos de nosotros estamos tan ocupados que solamente intentamos mantenernos a flote. No tenemos tiempo, menos aún energía, para mejorar nuestra situación actual.
Claro, seguir el paso de la vida a veces es como un trabajo de tiempo completo. ¿Y si hubiera una forma a prueba de ocupaciones para comenzar a hacer más todos los días de lo mejor que sabes hacer, independientemente de lo que exija tu trabajo o pida tu jefe?
Usa tu fortaleza
Numerosos estudios sugieren que el desarrollo de tus propias fortalezas (todas esas cosas que te gusta hacer y que haces muy bien) te hacen sentir más confiada, motivada y feliz en el trabajo. En mi caso, la clave fue crear un hábito para desarrollar mi fortaleza en 11 minutos al día aprovechando el ciclo neuronal señal, rutina y recompensa de mi cerebro.
Y no soy la única. Con la ayuda de Live Happy y VIA Institute casi 4,000 personas de todo el mundo se unieron al reto Global Strengths Challenge y muchas indicaron que esta breve práctica diaria las hizo sentir más revitalizadas, comprometidas, respetadas, apreciadas y motivadas a seguir progresando en el trabajo. Todo a partir de tan solo 11 minutos.
Pero ¿cuáles serían los hábitos de desarrollo de fortalezas más efectivos para tu caso?
Estos son los cinco hábitos que más han ayudado a la mayoría de las personas a generar cambios significativos, tanto en su desempeño como en su bienestar laboral:
- Creatividad: Cada mañana al despertar (señal) dedicaré 10 minutos para escribir de la manera más concisa posible cualquier problema que me esté afectando en este momento y también todas las soluciones creativas posibles que pueda antes de identificar una para probar ese día (rutina). Después pegaré una etiqueta en mi tabla de recompensas y cuando la haya completado me regalaré un masaje (recompensa).
- Esperanza: Cuando vaya a buscar mi café cada mañana (señal), dedicaré 10 minutos para reunirme con uno de mis compañeros más optimistas y saber qué lo entusiasma en ese momento (rutina). Después terminaré mi café (recompensa).
- Diligencia: Al llegar a mi trabajo (señal) revisaré mi lista de cosas por hacer para asegurarme que puedo cumplir cada tarea y si es necesario cambiar algo, le haré saber a todas las personas involucradas para que sigan confiando en mi palabra y puedan organizarse (rutina). Mi recompensa será mi té verde de la mañana (recompensa).
- Amor por aprender: Cada mañana al sentarme frente a mi computadora (señal) miraré un video de 10 minutos que me enseñe algo nuevo (rutina) y después compartiré lo que aprendí en las redes sociales (recompensa).
- Inteligencia social: A la hora del almuerzo (señal) me sentaré en la sala de personal para mantener una conversación significativa con algún colega y le haré preguntas genuinas sobre cómo van sus cosas, qué cosas andan bien (rutina). Celebraré tomando mi almuerzo (recompensa).
¿Puede un simple hábito de fortalezas ayudar a mejorar tu trabajo?
Si te gustaría recibir ayuda para promover el hábito de desarrollo de fortalezas en tu trabajo, te esperamos en el próximo reto Global Strengths Challenge. Visita strengthschallenge.com donde encontrarás una guía paso a paso para crear tu propio hábito de 11 minutos, recibirás recursos gratuitos y acceso para comunicarte con nuestros coaches en línea y aprender a poner tus fortalezas en movimiento.
Michelle McQuaid es autora bestseller y asesora, con una maestría en psicología positiva aplicada por la Universidad de Pensilvania.
